Contiene ligeros Spoilers
EL CABALLERO OSCURO REGRESA
Batman vuelve a la pantalla grande después de casi cinco años de ausencia, ahora de la mano del Director Matt Reeves. La trama es bastante directa, Batman lleva dos años como vigilante en Ciudad Gótica cuando surge un asesino serial que se hace llamar el Acertijo, será su trabajo, junto con el Teniente Jim Gordon, detenerlo antes de que cometa más homicidios.
Esta nueva versión es traída de la mano de Matt Reeves, un director bastante competente, que añade, con esta película, nuevos elementos al lenguaje visual de Batman en live action. Por ejemplo, antes de que podamos ver a Batman, primero escuchamos el pesado caminar de sus botas en el piso, como el héroe de un wéstern, mientras su capa ondea al viento, un caminado lento, pero firme. También, su uso de color es bastante atrevido -mención especial para la cinematografía de Greig Fraser, que es simplemente impresionante- con tonos rojos vibrantes que ayudan a acentuar los brotes de violencia; además, hay que reconocer el uso de enfoque superficial, una técnica usada en exceso hoy en día para inyectarle a los visuales un toque “cinemático”, pero que aquí es usado con propósito en escenas cuidadosamente seleccionadas para adentrarnos en el estado mental de Batman. Otro gran acierto de la dirección es la atmósfera, como en Se7en (David Fincher, 1995), la ciudad parece estar cubierta en oscuridad, en ahogándose en desesperación.
un oscuro lugar, llamado ciudad gótica
Hablando de atmósfera, la película siempre es tonalmente consistente esto (no solo es más difícil de lo que podría pensarse y es un gran logro de la dirección de Reeves) también se debe, en gran parte, a las actuaciones del impresionante elenco, todos saben qué tipo de película están haciendo y ninguno se siente fuera de lugar o flojo, todos están comprometidos con el material y, afortunadamente, el material es suficientemente rico para que lo puedan explotar. Del elenco, mis favoritos fueron el Pingüino de Colin Farrell (irreconocible detrás de toneladas de maquillaje y prostéticos), y el Teniente James Gordon de Jeffrey Wright quien ha formado una alianza intranquila con Batman, se puede ver el peso de trabajar en un lugar tan corrupto detrás de sus ojos, en el tono de su voz, es un hombre que lucha día con día, dentro del sistema, pero se encuentra lejos de lograr resultados. También, es destacable el trabajo de Zoë Kravitz como Selina Kyle/Gatúbela, tiene gran química con Pattinson, y no decepciona en las escenas dramáticas y de acción. Pero es el Carmine Falcone de John Turturro quien destaca, con sus ojos ocultos detrás de gafas ligeramente oscuras y su voz, tranquila, pero amenazante, como todo gran mafioso cinemático (pensemos en Michael Corleone de El Padrino o Tommy DeVito de Buenos Muchachos) no parece gran cosa a simple vista, pero hay una amenaza detrás de su voz, actúa como el rey de cualquier lugar en donde está, y puede ser verdaderamente escalofriante con un simple gesto de su mano, es una gran actuación.
"Es un Batman al borde, lleno de ira y violencia"
Robert Pattinson hace un buen trabajo como Batman (aunque dista de sus mejores actuaciones, como su papel en Good Time), su versión es más salvaje y animalística que la de Bale, se describe a si mismo como un “animal nocturno” y lleva un diario como Travis Bickle en Taxi Driver. Es un Batman al borde, lleno de ira y violencia, no es el objeto inamovible que era el de Christian Bale, más bien, es una fuerza implacable, entrando como un tren, sin importarle cuantos golpes y tiros reciba para lograr su objetivo. Es una actuación sólida, y logra hacer mucho con una simple mirada, o con la inflexión de su voz, pero el único problema que tengo con su actuación, que parecemás bien ser un problema de dirección, es que no hay una diferencia entre Batman y Bruce, en las pocas apariciones publicas que tiene como Bruce se muestra incómodo frente al público, no está pretendiendo ser el multimillonario que sale con modelos para distraer a la sociedad de su verdadera naturaleza. En esta versión de Batman, Bruce Wayne murió junto con sus padres y es Batman, el símbolo de venganza, el verdadero legado de los Wayne, y el verdadero rostro de Bruce. Aunque es temáticamente interesante, el problema es que no ayuda a demostrar todo el rango que tiene Pattinson como actor y como puede cambiar, con una facilidad aterradora, entre carismático e intimidante.
FAMILIARES EVOCACIONES
En algunas ocasiones, The Batman se siente como “mucha película”, no solo porque su duración excede los 150 minutos, sino por la ambición y tamaño de su historia. Esta es una película épica de crimen como Heat de Michael Mann (no solo en su temática, sino, además, en su estructura), y hay que reconocerle al estudio que le permitió a Reeves contar esta historia de forma completa. Hay tramas y subtramas que cualquier otra película del género guardaría para una secuela, spinoff o crossover, pero aquí son llevadas a su conclusión, lo cual es narrativamente satisfactorio y me gustaría que ver que más blockbusters siguieran este ejemplo. Algunos tendrán problemas con la forma en la que está estructurada, pero en lo personal, aprecio bastante el valor de parte del cineasta y la producción en general de salirse de la estructura tradicional de las películas de superhéroes.
"Esta es una película épica de crimen"
Come mencionaba, The Batman ha sido claramente inspirada por thrillers como Se7en y Zodiac (David Fincher, 2007), y sagas de crimen como Taxi Driver (Martin Scorsese, 1976), Heat (Michael Mann, 1995) y películas de Cine Negro como Chinatown (Roman Polanski, 1974), robando elementos y parte de su lenguaje cinemático; sin embargo, esto en algunas ocasiones me dejó con un sabor de “artificialidad” que me impidió adentrarme por completo en la película. Por ejemplo, en la brillante secuencia inicial donde el Acertijo está observando a su primera víctima, por medio de binoculares, no podía dejar de pensar en la mejor lograda secuencia inicial de Jack Reacher (Christopher McQuarrie, 2012), o el atuendo del Acertijo, una clara referencia visual al asesino del Zodiaco. Es normal que los cineastas “roben” del trabajo de otros, eso es prácticamente la base del lenguaje visual de Quentin Tarantino (después de todo, los grandes artistas roban), pero aquí me distrajo bastante, dejándome “frío” en ocasiones que debería estar sintiendo emoción, suspenso o peligro. A pesar de lo anterior, he de reconocer que algunas de estas referencias visuales también funcionan a favor de la película, como una secuencia que evoca el final de Chinatown.
ENTRE LA EXPLOTACIÓN Y EL ENTRETENIMIENTO
Como sus inspiraciones, The Batman es oscura y violenta, tomando inspiración, además, en tragedias reales (por ejemplo, hay una secuencia que evoca, de forma escalofriante, el tiroteo de Las Vegas, Nevada en 2017), pero a diferencia de los trabajos que la inspiraron, no es claro si la película está tratando de tomar esas tragedias para comentar sobre ellas, o para explotarlas en aras del entretenimiento, por la mayor parte de su duración The Batman cruza por esta cuerda floja hábilmente, pero, cerca del desenlace, parece inclinarse más al lado de la explotación, lo cual me dejó con un mal sabor de boca.
"¿qué es la justicia? ¿qué es la moralidad?"
Esto se relaciona con otro de los problemas que tengo con esta película, y es que aún no estoy seguro de que es lo que Matt Reeves quiere decir con The Batman. Batman tiene un arco claramente definido y es satisfactorio ver como se resuelve, la película explora los grises matices de la moralidad y la justicia, sobre todo en un lugar tan corrupto como Ciudad Gótica, pero no queda claro cuál es el objetivo final de la película. Aunque es importante y necesario que las películas de superhéroes aborden temas como estos, después de todo, si los superhéroes son los encargados de impartir justicia, es necesario preguntarse ¿qué es la justicia? ¿qué es la moralidad? Sin embargo, es frustrante que la película no parece muy interesada en tratar de resolver estos cuestionamientos, al menos no por completo. Aunque Batman entiende que debe de ser más que un vigilante, que debe convertirse en un héroe (ilustrado de forma poética en una secuencia visualmente impactante), pero no queda claro si esto es suficiente para resolver los verdaderos problemas de fondo de Ciudad Gótica y termina dando lugar a más preguntas, como: ¿se puede resolver la corrupción y desigualdad institucionalizada a trancazos? De haber una secuela, me gustaría que Reeves y su coguionista Peter Craig exploren estos temas de fondo.
También, tengo curiosidad ver cómo la audiencia reacciona a esta película, sobre todo las audiencias mexicanas, ya que los paralelos entre Ciudad Gótica y la propia realidad de nuestro País, nuestro gobierno y autoridades, tienen inquietantes paralelos.
CONCLUSIONES
En conclusión, The Batman es una película densa, larga en duración y épica en ambición, que tiene más en común con los thrillers de David Fincher y sagas criminales como Heat y películas de detectives como Chinatown. Explora facetas de Bruce Wayne y Batman que ninguna otra película de live action había explorado, agregando nuevos elementos al lenguaje visual del Caballero Oscuro, y levanta cuestionamientos interesantes entre la moralidad y la justicia, y la diferencia entre un héroe y un vigilante. Aunque sus inspiraciones visuales me dejaron frío en algunos sitios, y es cuestionable la forma en la que explota tragedias reales, esta es una gran adición al canon de Batman y, por sí sola, es una gran película de crimen.
Título original: The Batman.
Dirección: Matt Reeves.
Guión: Matt Reeves, Peter Craig.
Elenco Principal: Robert Pattinson, Zoë Kravitz, Andy Serkis, Jefrrey Wright, Colin Farrell, John Turturro, Paul Dano.
Cinematografía: Greig Fraser.
Edición: William Hoy, Tyler Nelson.
Diseño de Producción: James Chinlund.
Música: Michael Giacchino.
Año: 2022.
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